Google y Facebook pueden tener un buen trato cuando se trata de vender anuncios digitales
Tanto Google como Facebook han dicho que acuerdos como este son comunes en el juego de la publicidad digital y no sofocan la competencia. El informe plantea preocupaciones sobre la estructura de los acuerdos realizados en el mundo de la tecnología, especialmente porque hasta ahora nunca se han reportado beneficios especiales que Google ofrece a Facebook. Por ejemplo, documentos judiciales revelaron que Google le da a Facebook 300 milisegundos para ofertar por anuncios. Esto le da a Facebook una gran ventaja sobre algunas de las empresas asociadas de Google que, según los informes, solo tienen 120 milisegundos para ofertar.
Julie Tarallo McAlister, portavoz de Google, dijo que la denuncia “tergiversa este acuerdo, así como muchos otros aspectos de nuestro negocio de tecnología publicitaria”. Agregó que Facebook es solo una de varias empresas que participan en el programa liderado por Google y que Facebook es socio de otras empresas que ejecutan programas similares. El portavoz de Facebook, Christopher Sgro, dijo que acuerdos similares al entre Facebook y Google “ayudan a aumentar la competencia en las subastas de anuncios. Cualquier sugerencia de que este tipo de acuerdos dañan la competencia es infundada”. Al propio Google le preocupaba que Facebook, uno de los mayores compradores de publicidad del mundo, pudiera competir con Google en este aspecto del negocio de la publicidad digital.
La pareja se unió para representar más de la mitad de todo el gasto en publicidad digital en 2019. Sally Hubbard, ex fiscal general de la Oficina Antimonopolio de Nueva York, cree que Google y Facebook no compiten entre sí. Él siente que al trabajar juntos, los dos en realidad “… refuerzan mutuamente el poder de monopolio”. Hablando de monopolios, Google y Facebook supuestamente hicieron arreglos para que Facebook ganara un porcentaje determinado de los anuncios por los que ofertaría. La denuncia dice: “Sin el conocimiento de otros participantes del mercado, no importa qué tan alto puedan ofertar otros, las partes han acordado que el mazo caerá a favor de Facebook un número determinado de veces”. Google respondió a esto afirmando que Facebook aún no tiene la oferta más alta para ganar una subasta.
Después de que un usuario hace clic en un enlace en una página web, las ofertas por el espacio publicitario se colocan en las plataformas de intercambio y la oferta ganadora se transmite a un servidor de anuncios. Dado que Google domina tanto el intercambio como el servidor, la empresa generalmente se encarga de ejecutar el anuncio. Para escapar del proceso de Google, se desarrolló un sistema llamado encabezado de ofertas. Los sitios se abrieron a la solicitud de múltiples intercambios al mismo tiempo y en 2016 este proceso fue utilizado por el 70% de los editores.
Google ha luchado contra las ofertas de encabezado con su propia Open Bidding, que utiliza una alianza de intercambio. Si bien esto permite que otros intercambios compitan con Google, Google recibe una comisión por cada oferta ganadora.